La ergonomía es un concepto prioritario cuando se habla de diseñar espacios, de integrar elementos en el hogar, pero conseguir armonía entre todos estos términos es más sencillo de lo que parece. Solo es cuestión de números.
Con unas pocas matemáticas, podemos
establecer distancias entre elementos que nos permitirán relacionarnos
de una forma más natural y cómoda con nuestro mobiliario, al tiempo que
obtendremos un espacio acogedor y ergonómico para afrontar nuestras
necesidades.
McHaus, la
marca de mobiliario del grupo Prat Brands, nos da algunos consejos para lograr la
mejor funcionalidad en dos estancias tan prioritarias como son el salón o el
dormitorio. ¡Toma nota!
El salón: el sofá como punto de referencia
Uno de los espacios en los que más
tiempo pasamos es el salón, por lo que es muy importa sea acogedor y
consigamos aprovechar al máximo toda la estancia. Para ello puedes dejar una distancia de 40 a 45 centímetros entre el sofá y la mesa de centro. Además, la mesa debería medir aproximadamente un metro menos que
el largo del sofá para lograr una ergonomía adecuada.
La altura de la mesa de centro debería
oscilar entre los 35 y los 45 centímetros de altura, no más. Si tienes sitio
adicional, añade dos mesillas auxiliares a ambos brazos del sofá, separadas por
unos 20 centímetros. Si el salón no es lo suficientemente grande, puedes optar
por poner una mesilla a un lado y una lámpara de pie al otro. En caso de que no
se disponga de espacio, instala únicamente la lámpara de pie a uno de los dos
lados.
Ten cuenta que los sofás estándar de dos plazas miden entre 165 centímetros y 180 centímetros. Los de tres plazas están entre los 200 y los 220 centímetros, mientras los de cuatro plazas miden más de 240 centímetros. Estos números te ayudarán a hacer cálculos antes de amueblar el salón. Considera que, cuanto más anchos sean los reposabrazos, menos espacio habrá para acoger a tus visitas. Otro apunte más: si lo vas a colocar frente a un ventanal, procura que el respaldo sea bajo. Entrará más luz.
En el comedor, ¿mesa redonda o cuadrada?
La mesa es un elemento muy importante, así que tendrás que tener en cuenta las proporciones y dimensiones de tu comedor para elegir la mejor opción. Si es cuadrado, lo adecuado es una cuadrada o redonda, si es rectangular, es preferible una rectangular o en forma de óvalo. Las mesas redondas y cuadradas otorgan una mayor interactividad entre quienes se sientan a las mismas, mientras las rectangulares generan más contacto entre los que están más cerca. Tenlo en cuenta. Deja una separación entre la mesa y el mueble del comedor de unos 90 centímetros. Esto brindará una mejor movilidad a los comensales.
Considera cuánto ocupan las sillas para saber qué número de asientos podrás acomodar. Las que carecen de brazos deben contar con un espacio de unos 60 o 65 centímetros de ancho, por lo que si tu mesa mide 200 centímetros podrás instalar cómodamente tres a cada lado y dos en las cabeceras. Las sillas con brazos ocupan unos diez centímetros más, por lo que necesitarás una mesa más larga si la idea es colocar tres a cada lado.
El dormitorio: el centro es la cama
La cama es el epicentro sobre el que
deben girar el resto de componentes en el caso del dormitorio. Procura ubicarla
cerca de una ventana: la luz natural aporta mucha calidez a las estancias.
Entre la cama y las paredes o muebles
debería haber unos 70 u 80 centímetros para poder moverse cómodamente por la
estancia. Si tu dormitorio no es grande evita las piezas que no sean necesarias
y decántate por mobiliario más funcional, como las camas canapé, por ejemplo.
Son perfectas para almacenar la ropa de cambio de temporada, las maletas o la
ropa de casa.
Piensa cómo vas a utilizar las mesitas
de noche; si vas a necesitar cajones o sólo precisas de un ‘sobre’ o unos estantes
para poder dejar un libro, las gafas o un vaso de agua. Si en tu dormitorio hay
armarios y no tienes demasiado espacio te recomendamos que escojas un modelo
con las puertas correderas.
En el caso de que vayas a diseñar el
interior de un armario o un vestidor independiente, valora las necesidades
específicas de quienes lo van a utilizar para equiparlo con barras, estantes o
cajones.
Ante todo, ¡siéntete cómodo en tu hogar!
Ahora que ya conoces algunos trucos para mejorar la ergonomía en el hogar, es hora de ponerlos en práctica porque... ¡como en casa, en ningún sitio!
Y q viva la deco
ResponderEliminar